domingo, 30 de diciembre de 2007

Desde la distancia con afecto: El eco del alma

A ti,
agradeciendo tus visitas
y deseándote un feliz 2008.


El saludo como manifestación profundamente humana, hunde sus raíces en el tiempo. Acompañado de la caricia de una sonrisa, abre la compuerta del caudal expresivo, dando paso a la cordialidad, la complicidad, y la amistad.
Por eso hoy quiero enviarte una reverencia de palabras. Un apretón de pensamientos, una palmadita de ánimos que te hagan sentir afecto y atención.


¡Gracias por todo lo que me entregas con tu amistad!


Veo algunas aves volando en grupo. Pareciera que experimentan un cierto grado de atracción mutua, que deseasen, durante el vuelo, hallarse relativamente cerca de las demás, a la vez que guardar suficiente distancia para evitar los choques.
Hoy te llego como un aire furtivo, sentimientos que aletean enredados en el paisaje, el corazón y la memoria.

Cuando conozco a una persona no es el brillo social, la rúbrica de un apellido ilustre, ni el contorno de un exquisito diseño lo que determina que surja la empatía, sino más bien esa armonía que me envuelve cuando me acerco y le toco con las palabras y la cordialidad, cuando percibo su resonancia interior.


¡El eco del alma enlaza corazones!



Joshua Naraim Piñeiro

***

LA SOCIEDAD DE LOS POETAS MUERTOS

No dejes que termine el día sin haber crecido un poco,
sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento
No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte,
que es casi un deber.
No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras
y las poesías sí pueden cambiar el mundo.
Pase lo que pase nuestra esencia está intacta.
Somos seres llenos de pasión.
La vida es desierto y oasis.
Nos derriba, nos lastima, nos enseña,
nos convierte en protagonistas de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa:
Tú puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar,
porque en sueños es libre el hombre.
No caigas en el peor de los errores: el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes. Huye.
"Emito mis alaridos por los techos de este mundo", dice el poeta.
Valora la belleza de las cosas simples
Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas,
pero no podemos remar en contra de nosotros mismos.
Eso transforma la vida en un infierno.
Disfruta del pánico que te provoca
tener la vida por delante.
Vívela intensamente, sin mediocridad.
Piensa que en ti está el futuro
y encara la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes puedan enseñarte.
Las experiencias de quienes nos precedieron
de nuestros "POETAS MUERTOS"
te ayudan a caminar por la vida.
La sociedad de hoy somos nosotros
Los "POETAS VIVOS"
No permitas que la vida te pase a ti
sin que la vivas....

Walt Whitman


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sábado, 15 de diciembre de 2007

El árbol de navidad

Coloca tus ojos en un cielo inmóvil
y escucha en el iris el corazón de una imagen que abre su luz...

Abandónate y cuelga tu nombre
en este árbol cargado de ternura, de paz y de sosiego.
¡Que la armonía baile en vuestros corazónes!
Joshua Naraim
*
**
*****
Quisiera
armar en estos
días
un hermoso árbol de
Navidad.
Y colgar, en lugar de regalos,
los nombres
de todos mis amigos. Los de cerca
y los de lejos. Los de siempre y los de
ahora.
Los que veo cada día, y los que raramente
encuentro,
Los siempre recordados, y los que a veces se me
olvidan.
Los constantes y los inconstantes. Los de las horas
difíciles, y los de las horas alegres. A los que sin querer
herí, sin querer me hirieron. Aquéllos a quienes conozco
profundamente, y aquéllos a quienes apenas conozco por sus
apariencias.
Los que me deben, y a quienes debo mucho. Mis amigos humildes
y mis amigos importantes. Por eso os nombro a todos, a todos los amigos
que pasaron por mi vida.Los que recibís este mensaje y los que no lo recibirán.
Un árbol de raíces profundas para que vuestros nombres nunca sean arrancados.
Un árbol que al florecer el año próximo nos traiga ilusión, salud, amor y paz.
Ojalá que en Navidad, nos podamos encontrar para compartir los mejores deseos de
esperanza
poniendo un poco
de felicidad en aquellos
que todo lo han perdido.

¡FELIZ NAVIDAD!




las 4 velas

Cuatro velas se estaban consumiendo lentamente

El ambiente estaba tan silencioso que se podía oír el diálogo entre ellas.

La primera dijo:

-¡Yo Soy la Paz! A pesar de mi Luz, las personas no consiguen mantenerme encendida.
Y disminuyendo su llama, se apagó totalmente.

La segunda dijo:

-¡Yo me llamo Fe! Infelizmente soy superflua para las personas, porque ellas no quieren saber de Dios, por eso no tiene sentido continuar quemándome.
Al terminar sus palabras, un viento se abatió sobre ella, y esta se apagó.

En voz baja y triste la tercera vela se manifestó:

¡Yo Soy el Amor! No tengo mas fuerzas que quemar. Las personas me dejan de lado porque solo consiguen manifestarme para ellas mismas; se olvidan hasta de aquéllos que están a su alrededor.
Y también se apagó.

De repente entró una niña y vio las tres velas apagadas.
-¿Qué es esto? Ustedes deben estar encendidas y consumirse hasta el final.

Entonces la cuarta vela, habló:
-No tengas miedo, niña, en cuanto yo esté encendida, podemos encender las otras velas.

Entonces la niña tomó la vela de la Esperanza y encendió nuevamente las que estaban apagadas.

¡Que la vela de la Esperanza nunca se apague dentro de nosotros!




lunes, 10 de diciembre de 2007

Todos necesitamos a alguien

Cuando el pensamiento es claustro intímo del alma
habitado por dos, nace la oración.
Habla uno en silencio, lleno de voz...

***************

Todos necesitamos a alguien. Desde que nacemos somos la herida abierta de un nombre, príncipes voluntariamente destronados por la sombra de un ser. En nuestros primeros balbuceos destella la corola de unos labios que nos pronuncian. Y si abrimos los ojos alguien nos cruza a su ladera. Todos necesitamos a alguien parta tener historia, para entrar en la aurora con las alas de un secreto, para atardecer en el horizonte cansado de otro corazón. Todos necesitamos a alguien para que nuestras palabras se escuchen como señas de lo que en silencio constantemente arriba. Y así quien responda sepa que la voz que oye está pulsada por la translúcida campana de lo ausente. Todos necesitamos ser sueño de alguien para que se abra en nuestra soledad el cuerpo de lo invisible y abracemos su fantasma de luz hasta confundir el tiempo. Todos necesitamos deshabitarnos en la memoria de alguien cuando la sangre desborda sus estrellas. Nuestra imagen, clara se refleja en la distancia hacia otro ser. Nunca triunfamos solos, sino que siempre en corazón planta su rosa en el centro de nuestra gloria. Y su aroma nos devuelve a la pureza del principio. Nunca fracasamos solos, pues la fidelidad de una voz en su tiempo nos resucita. Detrás de cada movimiento nuestro otros pasos nos dibujan en su paisaje. Y no hay silencio sin dos. Somos el flujo de la mirada que nos sostiene, el ala rota del pájaro de otro pecho. Y si lloramos nuestras lágrimas resbalan por el espacio vacío que dejó otro ser. Somos el infinito de un momento de amor, el rostro de quién un día nos besó. Y se hizo carne. Somos el día siguiente de un cuerpo que una noche nos navegó. Somos lo que no somos cuando alguien dentro de nosotros ardió. Vivimos como una cometa prendida al seno del aire de otro ser. Su pulso es nuestro rumbo. Y cuando ya no estemos alguien todavía respirará el mundo desde nosotros.

Javier Lostalé










viernes, 7 de diciembre de 2007

Las lágrimas



...Porque el destino del hombre es el amor

y cada uno tiene su propia lucha y su propio camino.

Francisco Brines


Las lágrimas, como el desnudo, nos dejan un momento indefensos, sin que nos atrevamos a entrar en su territorio. Entre las lágrimas y nosotros existe la distancia insalvable de lo que, de pronto, se nos revela tan sin más cara que el espacio arde en la tensión del instante. Y sentimos el vértigo de encontrarnos a solas con la pulpa de un ser que, sin pudor, pues verdadero, se nos muestra. Las lágrimas son el cuerpo visible de lo insondable, por eso su aparición nos enmudece y nos convierte en pequeños y titubeantes servidores de lo que, tomándonos, se nos escapa. Nunca sabremos el momento exacto en que unos ojos tiemblan transparentes antes de que el rostro se nuble con una dignidad que suspende el aire. Nunca hallaremos el modo de pasar al otro lado de las lágrimas, pues nuestros pasos se adelgazarían hasta tocar el silencio azul del alma. Las lágrimas reinan siempre en un regazo, por eso se derrumban, por eso se derrumban en los brazos invisibles que detienen el tiempo, allí donde la vida cabe en la arritmia de un sofoco. Las lágrimas son turbión que deriva en una calma de infancia. El sonido de la lágrimas es el de un beso sin labios, el de un pulso de imágenes tan próximas que se quemadura las oscurece. Si una mano resbala por unas lágrimas, la caricia se vuelve firmamento. Si unos ojos miran unas lágrimas, ven cómo tiembla en el fondo un ser desligado. Las lágrimas de una madre respiran iluminadas en toda la casa. Juntas todas las lágrimas, en su rosa de niebla gira puro el corazón del mundo.

Javier Lostalé





jueves, 6 de diciembre de 2007

Llénalo de amor

A Olimpia,
...sale tan cara la ternura

Una pasión fría endurece mis lágrimas.
Pesan las piedras en mis ojos: alguien
me destruye o me ama.

Antonio Gamoneda
*********

Siempre que haya un hueco en tu vida,
llénalo de amor.
Adolescente, joven, viejo:
siempre que haya un hueco en tu vida,
llénalo de amor.
En cuanto sepas que tienes delante de ti un tiempo baldío,
ve a buscar amor.
No pienses: Sufriré.
No pienses: Me engañarán.
No pienses: Dudaré.
Ve, simplemente, diáfanamente, regocijadamente,
en busca del amor.
Qué índole de amor?
No importa.
Todo amor está lleno de excelencia y de nobleza.
Ama como puedas, ama a quien puedas, ama todo lo que puedas...
pero ama siempre.
No te preocupes de la finalidad del amor.
Él lleva en sí mismo su finalidad.
No te juzgues incompleto porque no responden a tus ternuras;
el amor lleva en sí su propia plenitud.

Siempre que haya un hueco en tu vida,
llénalo de amor!

Amado Nervo




miércoles, 5 de diciembre de 2007

Convención de los heridos de amor

Como si te posases en mi corazón y hubiese luz dentro de mis venas
y yo enloqueciese; todo es cierto en tu claridad:

te has posado en mi corazón,

hay luz dentro de mis venas,

he enloquecido dulcemente.

Antonio Gamoneda
************
Disposiciones generales:

A – Considerando que el dicho de que “en el amor y en la guerra todo vale” es completamente verdadero;

B – Considerando que en lo relativo a la guerra contamos con la Convención de Ginebra, adoptada el 22 de agosto de 1864, que determina cómo debe tratarse a los heridos en el campo de batalla, mientras que hasta hoy no se ha promulgado ningún documento que regule la situación de los heridos de amor, muy superiores en número;

Se decreta que:

Art. 1 – todos los amantes, independientemente de cuál sea su sexo, quedan advertidos de que el amor, además de ser una bendición, también es algo extremadamente peligroso, imprevisible, que puede acarrear serios daños. Por lo tanto, quien tenga la intención de amar, debe ser consciente de que está exponiendo su cuerpo y su alma a heridas de muy diferentes tipos, sin poder culpar por ello a su pareja en ningún momento, puesto que ambos corren el mismo riesgo.

Art. 2 – Una vez alcanzado por una flecha del arco ciego de Cupido, debe solicitarse inmediatamente al arquero que dispare la misma flecha en la dirección opuesta, con el objeto de no sufrir la herida conocida como “amor no correspondido”. En el caso de que Cupido se niegue a hacerlo, la Convención que en estos momentos se promulga exige del herido que de manera inmediata se arranque la flecha del corazón y la tire a la basura. Para llevar esto a buen puerto, debe evitar llamadas telefónicas, mensajes de correo electrónico, envíos de flores (siempre rechazadas), o cualquier otra forma de seducción, pues semejantes medios, si bien pueden dar algún resultado positivo a corto plazo, no resisten el paso del tiempo. La Convención decreta asimismo que el herido debe buscar sin falta la compañía de otras personas, así como debe imponerse al pens! amiento obsesivo que le dice “vale la pena luchar por esta persona”.

Art. 3 – En el caso de que la herida provenga de un tercero, es decir, que el ser amado se sienta atraído por alguien que no estaba a priori en el guión, queda expresamente prohibida la venganza. En este caso, se permite el uso de lágrimas hasta que los ojos se sequen, así como algunos puñetazos en la pared o en la almohada, o reuniones con amigos donde poder insultar a gusto al antiguo(a) compañero(a), incidiendo en su perfecta falta de gusto, pero sin llegar a difamar su honra. La Convención determina que también se aplique en este caso la regla del Art. 2 que mueve a buscar la compañía de otras amistades, sólo que evitando en la medida de lo posible los lugares que la otra persona frecuenta.

Art. 4 – En lesiones leves, clasificadas aquí como pequeñas traiciones, pasiones fulminantes que no duran mucho, o desinterés sexual pasajero, debe aplicarse con generosidad y rapidez el medicamento llamado Perdón. Una vez aplicada tal medicina, no se debe volver atrás bajo ninguna circunstancia, y el asunto debe ser definitivamente olvidado, no utilizándolo jamás como argumento en una discusión o en momento de odio.

Art. 5 – En todas las heridas definitivas, también conocidas como “rupturas”, el único medicamento que tiene algún efecto se llama Tiempo. De nada sirve buscar consuelo en cartomantes (que siempre prometen el regreso del amor perdido), leer libros románticos (que siempre acaban bien), engancharse a una telenovela o cosas por el estilo. Se debe sufrir con intensidad, evitando radicalmente las drogas, los calmantes o las oraciones a los santos. En cuanto al alcohol, sólo serán permitidos dos vasos de vino diarios.

Consideraciones finales: los heridos por el amor, al contrario de los heridos en conflictos armados, no son víctimas ni verdugos. Optaron por algo que forma parte de la vida, y deben asumir, por consiguiente, la agonía y el éxtasis de su elección.

Y los que jamás fueron heridos por el amor, nunca podrán decir: “he vivido”. Porque no vivieron.

Paulo Coelho




domingo, 2 de diciembre de 2007

Decálogo de la ternura




1.- Todas las personas tienen urgente necesidad de dar y recibir amor. Aunque algunos pretenden lo contrario, si no dan o no reciben amor, la vida se oscurece.

2.- Para vivir y practicar la ternura no es necesario poseer grandes cualidades. Basta con decir con espontaneidad nuestro amor, sin avergonzarse de manifestarlo.

3.- La verdadera ternura se conjuga en voz activa y en voz pasiva. No sólo hay que dar ternura, sino que tenemos que recibirla con espontaneidad y con enorme alegría.

4.- La ternura debe expresarse con naturalidad y en todos los momentos de la vida. Pero, es mucho más imprescindible en los momentos tensos y difíciles.
5.- La ternura jamás se puede compaginar con el amaneramiento o la trivialidad. Mucho menos con la violencia o la agresividad.

6.- Expresar y vivir la ternura no significa ser débil, manejable, sino generoso y acogedor. La ternura no está reñida con la energía.

7.- La ternura no es exclusiva de la relación madre-hijo. La familia, los hermanos, los compañeros agradecen, asimismo, este sentimiento.

8.- A ser tierno se aprende cada día con amor. Nunca es demasiado tarde para comenzar a practicar.

9.- No se debe confundir jamás la sexualidad con la ternura. Si bien difícilmente podremos entender la verdadera sexualidad sin una delicada ternura.

10.- Dar, expresar, acoger y recibir ternura es siempre una muestra evidente de madurez.

¿Por qué privamos a los que nos rodean del bálsamo de nuestra ternura?

¿A qué viene seguir practicando la economía de las caricias en una sociedad cada vez más necesitada de encuentros amistosos?

Bicos y ternura



sábado, 1 de diciembre de 2007

Hagamos un trato



"...hoy te digo que podès contar conmigo,
como me dijo anoche mi hija de 4 años"
UMA
Cuando sientas tu herida sangrar
cuando sientas tu voz sollozar
cuenta conmigo
(de una cancion de Carlos Puebla)

Compañera
usted sabe
que puede contar
conmigo
no hasta dos
o hasta diez
sino contar
conmigo

si alguna vez
advierte
que la miro a los ojos
y una veta de amor
reconoce en los míos
no alerte sus fusiles
ni piense qué delirio
a pesar de la veta
o tal vez porque existe
usted puede contar
conmigo

si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo
no piense qué flojera
igual puede contar
conmigo

pero hagamos un trato
yo quisiera contar
con usted
es tan lindo
saber que usted existe
uno se siente vivo
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos
aunque sea hasta cinco
no ya para que acuda
presurosa en mi auxilio
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe que puede
contar conmigo.

Mario Benedetti



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